Preguntamos a Teresa Pérez Cruz aogada experta en derecho mercantil francés, europeo e internacional con despacho de abogados en París por lla situación que se ha plantado en Francia tras las elecciones europeas del pasado día 9 de junio. El Presidente Macron decidió convocar elecciones en las que dados los resultados en las europeas la ultraderecha parte con muchas posibilidades de ganar. ¿que puede pasar en Francia? ¿como puede afectar a los negocios?. Teresa Pérez Cruz responde a estas y otras preguntas.

¿Qué pueden suponer las nuevas elecciones en Francia?

Las nuevas elecciones en Francia van a suponer sin duda polarización y nuevas revueltas. 

El partido fundado por los Le Pen, Rassemblement National en su programa para las legislativas de 2022 ya llevaba temas sensibles como “parar la inmigración controlada”, “poner fin a la reagrupación familiar” a la hora de extender visados, “expulsar sistemáticamente a los inmigrantes clandestinos” y “suprimir el ius solis”, el derecho a adquirir de forma automática la nacionalidad por el mero hecho de haber nacido en suelo galo. 

En el terreno migratorio, una victoria de la extrema derecha puede suponer un dilema: Francia, al igual que toda Europa, necesita inmigrantes ante una bajada drástica de la natalidad y ante la evidente escasez de mano de obra en determinados sectores (agricultura, ganadería, hostelería, construcción…). Estos problemas son incompatibles con las medidas propuestas por Le Pen. 

¿Qué esta cambiando en la sociedad francesa para que se dieran esos resultados en las elecciones europeas?

Desde mi punto de vista Francia lleva arrastrando durante años un problema migratorio por no haber gestionado correctamente la integración de estos migrantes, pues muchos viven en guetos ajenos al sistema tradicional francés. Esto ha generado fricciones en la población que se traducen en votos a partidos con medidas radicales sobre este punto. 

Además, con una presión fiscal tan elevada en Francia, un partido que propone eximir a los trabajadores de menos de 30 años de IRPF, eliminar el impuesto de sucesiones para clases medias, bajar los impuestos de la energía y aliviar la carga fiscal de las empresas puede ser muy tentador para muchos votantes.

¿Es factible una victoria de la ultraderecha en las elecciones francesas?

Sí, es factible. La extrema derecha nunca antes había estado tan cerca del poder en Francia. 

¿En que podría afectar a las empresas la victoria de la ultraderecha?

Las propuestas de Rassemblement National defienden un proteccionismo de las empresas nacionales frente a las extranjeras, apostando por una reindustrialización francesa al estilo de Donald Trump. 

No obstante, vivimos en una economía globalizada y sus negativas a integrar totalmente las normas de la Unión Europea pueden afectar seriamente la imagen de Francia como país seguro para invertir y generar empleo. Además, la incertidumbre política siempre genera inestabilidad en los mercados financieros.

¿Y a las relaciones del comercio intracomunitario?

Para las empresas comunitarias una victoria de la extrema derecha es probable que implique una mayor dificultad para implantarse en el país y barreras comerciales más estrictas con Francia. Por ejemplo, Jordan Bardella, candidato a primer ministro, ya llevaba en su programa para las europeas una postura clara para prohibir la deslocalización de trabajadores a Francia desde otros países y restringir la movilidad laboral en el seno de la Unión. 

Asimismo una victoria de la extrema derecha puede suponer un impacto en las cadenas de suministro, ya que las políticas proteccionistas y las barreras comerciales propuestas por estos partidos aumentan los costos y dificultan la logística de producción y distribución.  

¿Podria afectar algo con las relaciones con la UE?

Sin duda. Si la extrema derecha ganara las elecciones en Francia podría tener varias repercusiones en las relaciones con la Unión Europea, primero porque habría mayor división dentro de la institución y segundo porque Francia podría bloquear muchas iniciativas de la Unión, porque recordemos que son abiertamente euroescépticos. 

Otro de los puntos importantes es el apoyo a Ucrania, que se vería comprometido si Rassemblement National se alza con el poder y que retrasen la implementación de las medidas acordadas en el “acuerdo verde” de la UE.