Para los amantes de la aventura, las piscinas naturales y cascadas de Aling-Aling ofrecen una experiencia emocionante. Con toboganes naturales y la oportunidad de saltar desde las rocas, este lugar es perfecto para quienes buscan diversión y adrenalina.

Situado cerca del pueblo de Penglipuran, este bosque de bambú es un oasis de tranquilidad. Los altos bambús crean un ambiente sereno y refrescante, ideal para paseos relajantes y sesiones de fotos.

Parte del Parque Nacional Bali Barat, Menjangan es un paraíso subacuático. Sus arrecifes de coral y aguas cristalinas lo convierten en un destino privilegiado para el buceo y el snorkel, con una vida marina vibrante y diversa.

En el corazón de las montañas de Bali, las cataratas de Munduk ofrecen un refugio fresco y verde. Este lugar es ideal para caminatas y picnics, rodeado de la belleza natural y el aire puro de la montaña.

Conocida por sus excelentes condiciones para el buceo y el snorkel, la playa de Amed es un lugar tranquilo y pintoresco. Sus aguas claras y arrecifes coloridos son un deleite para los amantes del mundo submarino.