Entrevistamos a Dª LIDIA CLOSA, gerente de la red de despachos LEXUNION SPAIN, con sede en Madrid y oficinas en toda España y Europa. Las principales especialidades que ofrecen los despachos de la red LEXUNION son el derecho Mercantil, Bancario, Fiscal y de Sucesiones, tanto nacional como internacional. Cuentan entre sus miembros con abogados de gran prestigio en las áreas de sucesiones internacionales y derecho bancario y de los consumidores, aunque mantienen una fuerte práctica en mercantil, fiscal y laboral entre muchos de sus despachos miembros.
El 2020 ha sido un año especialmente difícil a causa de la pandemia, ¿qué balance podría hacer del mismo?
R.- Ha sido un año particularmente intenso, y en cierto modo de puesta a prueba de los despachos en cuanto a organización, tamaño y digitalización.
¿En que medida han cambiado la forma de ofrecer los servicios jurídicos de sus despachos?
R.- Las videoconferencias han tenido una gran aceptación, quizás porque no quedaba más remedio en algunos casos, pero ha servido para ver el potencial de este medio de reunión.
También ha servido para profundizar aún más en la digitalización y el “paperless” en nuestros despachos, que ya antes estaban en un alto grado de avance en transformación digital respecto a la media del sector.
Estos cambios, ¿han venido para quedarse?
R.- Creemos que sí, aunque no será todo 100% telemático, en cuanto se permita la vuelta a la normalidad prevemos un equilibro entre el mundo online y el offline.
En su caso, ¿le ha tocado participar en juicios telemáticos? ¿cómo valora esta experiencia?
R.- Sí, en algunos casos nuestros abogados han podido participar en alguna vista telemática. No deja de ser extraño, especialmente para los abogados con muchos años de experiencia, y quizás no permite que los abogados puedan mostrarse en su plenitud para lograr convencer al tribunal de sus argumentos; la videoconferencia limita un poco la comunicación no verbal en estos casos.
¿Han cambiado mucho las necesidades legales de los clientes durante el 2020?
R.- En nuestra opinión no, son las mismas que antes, aunque quizás se han extremado las áreas de práctica, aumentando concursal y laboral y reduciéndose otras más expansivas.
Desde el punto de vista de las novedades legislativas y pronunciamos judiciales, ¿qué es lo que considera más relevante en el 2020?
R.- Vemos relevante, aunque no precisamente bueno en nuestra opinión, la vorágine legislativa que hemos tenido desde el mes de marzo de 2020, a menudo con textos legales de baja calidad técnica, llenos de imprecisiones, erratas o conceptos jurídicos indeterminados, con Exposiciones de Motivos mucho más largas que el texto de la norma en sí, y con vaivenes que han dado algunos quebraderos de cabeza a nuestros despachos.
¿Qué perspectivas tiene su asociación para el 2021?
R.- Prevemos mantener el trabajo del año 2020, volviéndose a equilibrar las áreas de práctica a partir del segundo semestre, y con un repunte neto de los encargos a partir de 2022. En cuanto a despachos miembros, prevemos seguir creciendo en nuevas incorporaciones, aunque siempre con el filtro de calidad y perfil de despacho que mantenemos en Lexunion España, pues no somos un directorio de despachos sin más, sino una especie de club de firmas con un perfil similar que intercambiamos conocimientos, asuntos y especialidades.
Para este año que comienza se habla de varias reformas legislativas, ¿Qué es lo que considera que necesita una reforma urgente?
R.- En nuestra asociación somos una gran cantidad de abogados y todos tenemos diferentes requerimientos legislativos, seguro, pero vemos que en conjunto se requieren reformas en varios ámbitos, desde la LEC para adaptarla a los nuevos tiempos con videoconferencias y similares, hasta la fiscalidad o el derecho inmobiliario.
¿Cree que la Justicia será capaz de remontar en el 2021 el parón judicial ocasionado con la pandemia?
R.- Lo vemos difícil en general; la justicia ya arrastraba atascos antes de la pandemia, y los parones de este año van a empeorarlos. Si no se hace una serie reforma de la administración de justicia, tanto en equipamiento como en recursos humanos, seguiremos años con los plazos tan dilatados de respuesta que tenemos ahora. En Lexunion nos gustaría tener una administración de justicia ágil, eso ayudaría mucho al tejido productivo del país, a los particulares y a equilibrar la sociedad frente a los abusos que se producen muchas veces por la tardanza en tener respuesta de los juzgados y tribunales.