Las dudas sobre cómo gestionar las deudas sigue aumentando cada año siendo, de hecho, una de las cuestiones mercantiles que más preocupó a los ciudadanos el año pasado. Así lo refleja nuestro Observatorio Legálitas 2023, que analiza los principales motivos por los que nuestros clientes necesitaron un abogado durante ese año, y que muestra que la Ley de Segunda Oportunidad acaparó casi la mitad (43,35%) de las consultas efectuadas en esta materia.
Esta ley permite a las personas físicas, autónomos y pymes obtener el perdón de las deudas que tengan si no cuentan con activos o patrimonio suficiente para pagarlas.
¿Qué es la ley de Segunda Oportunidad?
Es un mecanismo que tenemos todos los ciudadanos a nuestra disposición para poder regularizar el pago de nuestras deudas bien mediante la exoneración o mediante un plan de pagos.
Dependiendo de cuál sea el caso o de nuestras circunstancias personales podremos acceder a ese mecanismo y a una de esas dos vías.
¿Cómo funciona la Ley de Segunda Oportunidad?
Cuando se inicia el procedimiento de exoneración de deudas, la situación tiene que ser de insolvencia para poder cumplir con mis pagos regulares a corto o medio plazo. Tengo unas deudas y con mis ingresos no puedo afrontar los pagos, por lo que puedo acogerme a ese procedimiento de segunda oportunidad.
Para ello debo tener en cuenta que:
- No se tengan antecedentes penales económicos porque eso me limita el acceso a la posible exoneración de las deudas.
- No sería aconsejable iniciar el procedimiento si tengo bienes libres de cargas como, por ejemplo, una casa que sea susceptible de venta y con la que se pueda liquidar parte o toda la deuda.
- Si se tienen créditos públicos, por ejemplo, con Hacienda o con la Seguridad Social se podrán condonar hasta 10.000 euros.
¿Quién puede acogerse a la ley de segunda oportunidad?
El procedimiento concursal está habilitado para todas las personas jurídicas, físicas que sean autónomos y también para particulares.
En todos los casos, los requisitos para cogerse a esta ley son los mismos:
- Estar en situación de insolvencia.
- No tener antecedentes penales en el caso de las personas físicas.
¿Qué ocurre, por ejemplo, si el deudor tiene propiedades?
Tanto si eres autónomo como pyme o particular las propiedades sirven para saldar esa deuda pendiente, ya que son bienes y como tal son susceptibles de venta. Se podrán liquidar dentro del procedimiento si es que no están cargadas o grabadas con algún crédito pendiente o una hipoteca.
¿Cómo se mide y determina que alguien es insolvente o que una empresa está en quiebra?
Cuando no puede hacer frente regularmente a sus pagos ordinarios a corto o medio plazo. Se entiende que hay insolvencia si se puede atender el pago de los gastos ordinarios en un plazo de dos meses, debiendo iniciar el concurso de la sociedad mercantil en ese caso.
¿Qué cantidad máxima de deuda se perdona en cada caso?
No existe una cantidad máxima, por lo tanto, es ilimitado. No depende tanto de la cantidad sino de las circunstancias que me han llevado a este procedimiento, cuáles han sido los motivos para ello, si ha habido un endeudamiento incontrolado o no porque, aunque yo cumpla con los requisitos que antes hemos comentado, el juez puede entender que no debería de ser agraciado con la exoneración de las deudas si yo me he endeudado con mala fe y a criterio del juez.
¿Tiene desventajas o consecuencias acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad?
En caso de exoneración completa o parcial por existir plan de pagos, tus datos se quedarán incluidos durante cinco años en el Registro Público Concursal. Esto impedirá sobreendeudamiento posterior y se velará por el cumplimiento con el plan de pagos que tienes propuesto.
Otra desventaja es que tu patrimonio puede ser intervenido o suspendido durante la tramitación del procedimiento y lo que podrá afectar a su libre disposición (venderlo, etc.).
Cómo se inicia el proceso de segunda oportunidad y dónde se realiza?
Todo proceso de segunda oportunidad o de concurso tiene que iniciarse con una solicitud inicial firmada por abogado y procurador que se presenta ante el Juzgado correspondiente.
¿Cuánto dura un proceso de Ley de Segunda Oportunidad?
Depende de que la persona tenga activo o no lo tenga. Si no tiene activo y ningún acreedor solicita el nombramiento de administrador concursal, porque no hay nada que liquidar, se solicitaría la exoneración y su trámite podría rondar los seis meses desde que se admite a trámite el concurso, todo dependiendo de los plazos judiciales.