Madrid, 5 sep (EFE).- La memoria de la Fiscalía correspondiente a 2023 recoge la creciente preocupación sobre una serie de delitos, como los protagonizados por menores, los ciberdelitos, el tráfico de drogas o los de odio.

Estos son algunos de los avisos que lanza el ministerio fiscal en el documento que se ha dado a conocer este jueves con motivo de la apertura del año judicial.

- Alarma por el acceso de los menores a las redes sociales.

El ministerio público pone el foco en la "alarmante" rebaja de la edad de acceso de los niños a las redes sociales. Cada vez es más temprano y cada día protagonizan más delitos, ya sea como autores o como víctimas.

La Fiscalía propone retrasar esa edad de acceso, aunque admite que solo con el enfoque de la prohibición no es suficiente.

- Más violencia sexual y machista entre menores.

Desde hace años, la Fiscalía advierte en sus memorias del auge de la violencia sexual entre menores, en parte explicado por la mayor sensibilización para denunciar. En la de 2023, advierte de una "espiral que no para de crecer".

En cuanto a la violencia machista, un incremento del 11 % en los casos, muestra que "no están calando entre nuestros jóvenes los grandes esfuerzos que se están realizando en la formación en igualdad, predominando una deficitaria educación en valores que el entorno educativo del menor no ha sabido paliar".

- La inmigración y la crisis humanitaria.

"Desde julio de 2023 comenzó una llegada ingente de cayucos a Tenerife y El Hierro, que se ha extendido a todas nuestras cosas y que ha supuesto una auténtica crisis humanitaria", advierte la memoria de la Fiscalía.

El documento deja constancia del incremento desde mediados del año pasado de la llegada de menores migrantes, con 4.865 solo en 2023.

- Impotencia ante el cibercrimen.

La Fiscalía lamenta la falta de formación y herramientas para investigar los ciberdelitos.

"Abordamos la investigación de delitos en el siglo XXI, en puertas de una nueva revolución con la Inteligencia Artificial (IA), con medios del siglo pasado, con todas las carencias imaginables y con unas consecuencias perturbadoras".

- Necesidad de tipificar nuevos delitos.

Urge a castigar nuevas prácticas delictivas como el "ransomware", que consiste en el secuestro de datos con fines extorsivos; el "deepfake", la manipulación de imágenes y vídeos con inteligencia artificial para suplantar la identidad de otras personas, o el "criptojacking", que es la transacción ilegal de criptomonedas utilizando dispositivos de terceros.

- Desbordados por las narcolanchas.

La Fiscalía constata también una "proliferación escandalosa" de narcolanchas para la introducción de hachís desde Marruecos, especialmente en la zona del Estrecho, así como la violencia con la que embisten a las fuerzas y cuerpos de seguridad, y admite "la impotencia del Estado ante unas redes criminales que deben ser inmediatamente desarticuladas".

Pero también ve "alarmante" la acumulación de narcolanchas incautadas que no pueden ser vendidas ni, en general, son usadas por las fuerzas y cuerpos de seguridad al no considerarlas idóneas para su trabajo. Se acumulan por los retrasos en las tasaciones y en la autorización judicial para su destrucción, con "un riesgo comprobado" de robos y vuelta al mercado de motores de gran valor.

- Sin medios para valorar el riesgo de las víctimas de violencia machista.

Advierte de la carencia de unidades de valoración forense integral, instrumento clave para evaluar el riesgo de las víctimas y sus hijos. "El panorama que plasman los y las fiscales en sus memorias es desolador", recalca el fiscal.

- Más delitos de odio y más atención a la violencia en el fútbol.

Los delitos de odio se han triplicado en un año, de 166 a 501, y eso que la Fiscalía se queja de que en la mayor parte de los territorios los sistemas informáticos de gestión no permiten categorizarlos como tal. La mayor parte de ellos, por racismo y xenofobia, seguidos por la orientación sexual e identidad de género.

También deja constancia la memoria de "la repetición de actos en relación a conocidos jugadores de fútbol", o la existencia de episodios de conductas violentas de grupos radicales en los estadios de fútbol o alrededores, que necesita "una respuesta común y coordinada para frenar su escalada e impedir su reiteración".

- El auge de la desinformación

La Fiscalía subraya la necesidad de proporcionar información veraz en un momento en el que "se informa desde perspectivas total e interesadamente contradictorias" y ello "sin que el contraste de la veracidad de los datos parezca ser un extremo relevante" para nadie.

- La siniestralidad laboral. Un drama que deja más de 500 fallecidos.

508 muertos en accidentes laborales. La Memoria deja constancia de que desde 2020 en ningún año se ha descendido de la cifra del medio millar de víctimas mortales.

Desde 2017 a 2013, la reducción fue constante (de 844 a 432), pero desde entonces no hay mejoras en esa trágica estadística,